viernes, 4 de enero de 2008

Necesito aire


Las paredes se me hacen cada vez más estrechas, todo lo que me rodea me quema.







El 2008 pretende ser un año de constantes cambios, pero 2007 terminará por pasar a mi recuerdo como aquél en el que tomé una de las peores decisiones de mi vida. Volví con ella, con la fuente de todos mis males, de todas mis desilusiones, la que me enseñó que amar también puede significar dolor, la que se encargó de matar lo que en su tiempo consideré lo más maravilloso que me había pasado.

Inconscientemente, ignorante de la realidad, concebí una nueva oportunidad... un nuevo comienzo para los dos. ¡Cuán equivocado estaba!

2007 termina por ser un año plagado de desgracias emocionales, incapaz de terminar con algo que ya andaba muerto desde que empezó, volví a cometer el error de temer a la soledad como compañera.

Ahora me siento atrapado. Incapaz de articular un grito de auxilio. Cada vez me ahogo más y más en este torbellino de amargura y desesperación.

Tengo algo claro: el amor, el verdadero amor, no te hace sentir así...